
Conexión mente, cuerpo y corazón
Los niños dependen del amor de todas las personas que los rodean para aprender y progresar en todos los sentidos.
Por Amy Shriver, MD
Mente, cuerpo y corazón son una sola unidad. El amor y la comprensión de todas las personas en la vida de los niños los ayuda a comprender esa conexión. La mente, el cuerpo y el corazón impulsan el desarrollo, el aprendizaje, ayudan a los niños a desarrollar un concepto positivo de sí mismos y a construir relaciones sólidas con los demás.
Cuando los niños están sanos de mente, cuerpo y corazón, ellos están preparados para alcanzar su máximo potencial. Como padre o cuidador, todo lo que usted haga (sus respuestas e interacciones amorosas) ayuda a su pequeño a desarrollarse en estas tres áreas.
Mente sana: la crianza de un niño pequeño significa estimular su cerebro mediante interacciones positivas y divertidas como cantar, hablar, jugar y leer.
Cuerpo sano: asegúrese de que tengan una alimentación nutritiva para que desarrollen un cuerpo sano, de que los niños duerman las horas recomendadas y de que mantengan el cuerpo en movimiento todos los días. Estos hábitos físicos saludables contribuyen al desarrollo del cerebro y al bienestar emocional de los niños.
Corazón sano: parte integral del cuidado es atender las necesidades emocionales del niño, o sea las “necesidades del corazón”. Una vida interior saludable ayuda a los niños a comprender y a manejar sus propios sentimientos, a la buena relación con sus padres, cuidadores y compañeros y a ser el mejor amigo de sí mismo.
Amy Shriver es una pediatra en el Blank Children’s Hospital en Des Moines y profesora asistente de medicina especializada en la Facultad de Medicina Osteopática de la Universidad de Des Moines. Es miembro de la Junta Ejecutiva del Consejo de Primera Infancia y es Directora Médica de Reach Out and Read Iowa.

Juntos y seguros
Cuando las familias tienen que salir de casa para estar sanos y salvos, es bueno recordar que hogar es donde está el amor.

La hora de las burbujas
Una actividad tranquila, como soplar burbujas, puede ayudar tanto a los niños como a los padres y cuidadores a respirar profundamente, reducir la velocidad y a calmarse.

Poder del crayón

Hasta luego caracola
Una rutina de despedida especial y amorosa puede hacer más fácil las separaciones.

Brazaletes de amistad
Cuando es difícil estar separados de los seres que amamos, las cosas más pequeñas pueden convertirse en grandes recordatorios de que alguien nos ama y está pensando en nosotros.

La belleza de las nubes
Pasar tiempo afuera de la casa nos recarga la energía para todo el día.

Abrazos de almohada
Abrazar una almohada con funda de un artículo de vestir del padre o cuidador ausente ayuda a calmar y a reconfortar al niño.