Estrategias para relajarse

Cuando nuestro cerebro está preocupado por grandes sentimientos como el miedo, la ansiedad o el enojo, las técnicas simples y las actividades no verbales ayudan a niños y a padres a “liberarse” de esos sentimientos. Practique estas estrategias con los pequeños (recuerde, que también funcionan con los padres), luego hablen sobre otras formas en que pueden sentirse tranquilos, seguros y reconfortados. 

• Respirar Prestar atención a nuestra respiración nos ayuda a volver al momento presente, y se puede hacer en cualquier momento y en cualquier lugar. Respire profundo tres veces, inhalando por la nariz y exhalando por la boca y sienta que su vientre sube y baja. 
• Mover el cuerpo A veces nuestros sentimientos son demasiado grandes para las palabras. Invite a los niños a expresar sus sentimientos con el cuerpo. Podrían saltar arriba y abajo, estirarse hacia lo alto, apretarse como una pelota, correr muy rápido o bailar una canción alegre. 

• Dibujar los sentimientos Los niños pueden expresar sus sentimientos a través del arte. Puede pedirles que dibujen lo que los puso tristes, enojados, felices o que exploren el sentimiento (¿De qué color es tu tristeza? ¿De qué forma es?). Estas preguntas pueden ayudar a los niños a aprender sobre sus emociones y a sentirse cómodos hablando de ellas. 
• Llevar un diario Ofrezca a los niños su propio cuaderno para que escriban o dibujen cualquier cosa, como lo que sucedió durante el día, un cuento inventado, un poema. El hecho de escribir los ayuda a ordenar los pensamientos y a darle sentido a la nueva información. Si los niños aún no escriben solos, pueden contarle sus pensamientos y usted los escribe. 
• Acurrucarse con un objeto reconfortante Tener algo familiar para conservar durante los cambios, como una manta favorita, una prenda del color favorito o un animal de peluche les da a los niños una sensación de seguridad.