
En sintonía con las necesidades de cada niño
Explore las formas particulares de pensar, sentir, comportarse de cada niño y cómo puede usted adentrarse en el mundo de los niños.
Los niños y las personas mayores responden a situaciones y desafíos de manera diferente. Ser conscientes de la singularidad de cada niño ayuda en gran medida a comprender cómo se comportan y qué podrían necesitar. Cuando conozca las necesidades particulares de su niño, guíelo para que él se comprenda más profundamente a sí mismo y ayúdelo a manejar mejor sus sentimientos y sus momentos difíciles.
Por ejemplo, algunos niños
- son tímidos cuando conocen a otras personas;
- se sienten más malhumorados que otros cuando hay cambios en el horario de dormir;
- necesitan más actividad física en ciertos momentos del día;
- luchan por completar sus planes cuando enfrentan frustración o decepción;
- tienen sentimientos muy intensos, tal vez necesitan un poco más de tiempo para recuperarse después de tener grandes sentimientos.
Cada niño tiene sus propios dones, perspectivas y particularidades. Al ayudar a los niños a comprenderse a sí mismos a través de su apoyo amoroso, ellos pueden sentirse mejor preparados para enfrentar los desafíos de la vida.
Observen y analicen juntos las diferentes circunstancias.
- Qué tan activos son: algunos niños son más activos físicamente, “nunca están quietos” y agitados. Otros pasan más tiempo en silencio, quietos o moviéndose a un ritmo más lento.
- Cómo responden a la rutina: algunos niños progresan con las rutinas y los horarios establecidos, otros no los necesitan tanto.
- Cómo responden a situaciones nuevas: algunos niños se adaptan rápidamente a nuevas personas y situaciones, otros necesitan más tiempo y ayuda.
- Cómo expresan los sentimientos: algunos niños expresan sus sentimientos de forma más intensa o abierta, otros lo hacen de forma más sutil.
- Cómo perciben el mundo que los rodea: los niños perciben el ruido, la temperatura, la luz, las texturas y los ambientes (físicos y emocionales) de manera diferente.
- Cómo enfocan su atención: algunos niños pueden concentrarse más fácilmente que otros incluso con mucho ruido y mucha actividad a su alrededor.
- Cómo perseveran: algunos niños persisten en hacer algo hasta que lo terminan. Otros avanzan más rápidamente cuando surgen desafíos.
Ayudar a los niños a notar cómo responden en diferentes situaciones profundiza su autoconciencia. A medida que se enfrentan a nuevas situaciones desafiantes, este importante conocimiento de sí mismos y de las estrategias que les funcionan es crucial. Para ayudar el autodescubrimiento de los niños, usted podría decirles,
- Sé que a veces te sientes tímido cuando conoces gente nueva. Cuando lleguemos a la fiesta, me dices si quieres que tú y yo juguemos juntos un rato o si quieres mi ayuda para unirte a algún juego. Veamos cómo te sientes después de que lleguemos a la fiesta.
- Algunas veces los sentimientos pueden muy fuertes. Todos tenemos esos sentimientos fuertes. ¿Quieres hablarlo conmigo?
- Sé que ahora quieres estar contigo mismo y que tu hermana quiere ir al parque. Pensemos en que podemos hacer para que tengan el espacio que cada uno necesita. ¿Podríamos llevar libros para que tú y yo leamos mientras ella juega?

Juntos y seguros
Cuando las familias tienen que salir de casa para estar sanos y salvos, es bueno recordar que hogar es donde está el amor.

La hora de las burbujas
Una actividad tranquila, como soplar burbujas, puede ayudar tanto a los niños como a los padres y cuidadores a respirar profundamente, reducir la velocidad y a calmarse.

Poder del crayón

Hasta luego caracola
Una rutina de despedida especial y amorosa puede hacer más fácil las separaciones.

Brazaletes de amistad
Cuando es difícil estar separados de los seres que amamos, las cosas más pequeñas pueden convertirse en grandes recordatorios de que alguien nos ama y está pensando en nosotros.

La belleza de las nubes
Pasar tiempo afuera de la casa nos recarga la energía para todo el día.

Abrazos de almohada
Abrazar una almohada con funda de un artículo de vestir del padre o cuidador ausente ayuda a calmar y a reconfortar al niño.