La complejidad de la pérdida
Tenga en cuenta los diferentes sentimientos de dolor y de pérdida.
Cuando un ser querido muere lamentamos su muerte, lo que significó para nosotros, el papel que desempeñó durante su vida y el papel que “podría haber” desempeñado en el futuro. Es un gran cambio.
Después de la primera fase del dolor por la pérdida se enfrentan más cambios que van de grandes a pequeños y de corto a largo plazo. Se conocen como pérdidas secundarias y pueden complicar el duelo al agregarle a usted estrés y ansiedad.
Las pérdidas secundarias pueden incluir.
- Finanzas: los cambios financieros podrían requerir que usted cambie o consiga un nuevo trabajo, y que resuelva o establezca nuevos sistemas financieros.
- Modo de vida: cambios en las rutinas diarias, mudarse a otro vecindario o cambio de casa y de escuela.
- Cambios en las relaciones: cambios en su sistema de apoyo, con qué frecuencia ve a ciertas personas y cómo interactúa con ellas o ellas interactúan con usted. Podría perder relaciones o hacer otras nuevas.
- Identidad: cambios en la forma en que usted se identifica o se ve a sí misma, como viuda o jefe de familia de un solo padre (madre/padre soltero, familia monoparental).
Comprender y reconocer las pérdidas secundarias nos ayuda a avanzar en medio del dolor.
- Acérquese a personas que “lo entienden”, es decir, que están pasando o hayan pasado por algo similar.
- Sea sincero con su sistema de apoyo sobre lo que le está pasando. Hable de las diferentes emociones que estás sintiendo.
- Acepte la ayuda de otras personas.
- Dese sus propios méritos y sea amable consigo mismo.
Recuerde que no todo cambia
Incluso cuando muchas cosas se sientan como nuevas y diferentes, debe siempre recordar que algunas cosas siguen siendo igual. Haga una lista con su niño de lo que ha cambiado y de lo que sigue igual. Piensen si hay algo que sea “más o menos igual que antes”. Utilice este imprimible para hacer su lista.