
Empatía
Jean Bonbon tiene todas las galletas y sus amigos no tienen ninguna. ¿Compartirá sus galletas?
Mencione que al principio Cookie tenía dificultad para entender la empatía. La empatía es la habilidad de entender y sentir lo que otra persona siente. Vean juntos el video. Enseñarle a los niños la empatía usando ejemplos es una excelente manera de demostrar el significado de la palabra.
Los bebés
Fíjese en cómo reacciona su bebé a las distintas expresiones en su rostro. Hasta los bebés de tan solo seis meses observan a sus cuidadores para entender las cosas. Por ejemplo, cuando usted entrega su bebé a la abuela para que lo tome en brazos, usted puede sonreír de manera cálida y reconfortante.
Los niños pequeños
Cuando los niños pueden reconocer e identificar sus sentimientos, mejor logran reconocer los sentimientos de los demás – lo que es una clave para desarrollar la empatía. Intente poner los sentimientos en palabras en los momentos cotidianos: “¿Te sientes triste sin tu osito?” o “¡Ese helado te puso feliz!”.
Niños en edad pre-escolar
A medida que los niños empiezan a interactuar más con otros, pueden surgir situaciones difíciles (pelear por los juguetes, hacer nuevas amistades, o decidir cuál será el próximo juego). En esos momentos, pedirle a los niños que piensen sobre cómo sus acciones afectan los sentimientos de los demás es una oportunidad de mostrar empatía: “Juan está triste porque todavía no ha podido elegir un juego como los otros niños.¿Le puedes dar a Juan un turno para elegir uno de los juegos de la caja?”.

Juntos y seguros
Cuando las familias tienen que salir de casa para estar sanos y salvos, es bueno recordar que hogar es donde está el amor.

La hora de las burbujas
Una actividad tranquila, como soplar burbujas, puede ayudar tanto a los niños como a los padres y cuidadores a respirar profundamente, reducir la velocidad y a calmarse.

Poder del crayón

Hasta luego caracola
Una rutina de despedida especial y amorosa puede hacer más fácil las separaciones.

Brazaletes de amistad
Cuando es difícil estar separados de los seres que amamos, las cosas más pequeñas pueden convertirse en grandes recordatorios de que alguien nos ama y está pensando en nosotros.

La belleza de las nubes
Pasar tiempo afuera de la casa nos recarga la energía para todo el día.

Abrazos de almohada
Abrazar una almohada con funda de un artículo de vestir del padre o cuidador ausente ayuda a calmar y a reconfortar al niño.